Éste fue mi primer blog, lo quité por un capricho, así que supongo que es por otro que lo traigo de vuelta.
lunes, 13 de junio de 2005
Love is like oxygen / Moby Dick
"You get too much, you get too high; not enough and you're gonna die."
Es un juego. No hay reglas, uno las puede inventar, romper, cambiar. Dos jugadores, al margen del campo de juego poblado de toda clase de recuerdos. Muchos han sido malos, lo malo es que los buenos han sido muy buenos. Y ahora, ¿qué? Es un eterno retorno, es el principio. ¿Puede ser diferente? Sé muy bien lo que quiero, lo malo es que son dos cosas contradictorias. Por un lado quiero seguir, dejar esto atrás, superarlo y por otro lado correr a su lado de nuevo, mandarme otra vez, correr el riesgo, como ya he hecho tantas veces. ¿Puede ser diferente? Pues me gustaría, de un lado o del otro, tal vez es la definición lo que necesito. Should I stay or should I go? Me pregunto: siendo yo el mismo, en esencia siempre seré el mismo, ¿puedo jugar distinto? No con mala intención, nada del "smyler with the knif under the cloke," no, nunca podría ser así, por lo menos tengo esa decencia. Pero ser distinto, jugar cara a cara, duro, sin temor al dolor, siendo directo y sincero, brutalmente sincero, porque ya no podría temer el perderla por revelarle la verdad de mi corazón, pues ya la he perdido. Ya veremos. Ése es el punto. Es lo que deseo: verla una vez más. Y luego, ya veremos.
"There is come kind of evil inherent in the color white. The worst evil does not come from the darkness, but from the light itself."
Mi vida está dividida en trozos, como rebanadas de un queque. A la gente que me rodea, a cada uno le muestro partes específicas, no muestro todas a una persona (aunque lo hice, por un tiempo lo hice) ni le muestro las mismas a todos. Unos ven una parte, otros ven otra, algunos ven las dos, otros la fracción de una y un pedazo de la otra. Hay partes que sólo unos pocos han visto, otras no las ha visto nadie (ni lo hará,) en este mismo blog hay cosas que sólo escribiría aquí. Un ejercicio: en una silla vacía siente en orden consecutivo a su padre, a su mejor amistad, a su amante, a un compañero de trabajo. ¿Podría decirles a todo lo mismo? No hablemos de cómo quedó el partido ni de la invasión a Irak, sino de las cosas realmente vitales, algún secreto o resentimiento guardado, un comentario venenoso sobre alguien más o alguna vileza ejecutada. ¿Puede? ¡Qué envidia! ¿No pudo? Le doy la bienvenida al club.
No PD.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario